Hannah Watters, una estudiante de North Paulding High School en Dallas, Georgia, vio que una foto de pasillos llenos el primer día de clases se volvió viral. Y cuando vio que poco había cambiado después de eso, le dijo a Laura Coates de CNN el jueves, sintió que tenía que compartir cómo se veía dentro de la escuela. Entonces, tomó una foto de la escena y la publicó en las redes sociales.
«Me preocupaba la seguridad de todos en ese edificio y de todos en el condado porque no se estaban siguiendo las precauciones que los CDC y las pautas que los CDC nos han estado diciendo durante meses», dijo Watters.
CNN se comunicó con la escuela secundaria North Paulding y el distrito escolar del condado de Paulding y no ha recibido ninguna respuesta.
En una carta a la comunidad, el superintendente Brian Otott dijo que la foto se tomó fuera de contexto y escribió: «Los cambios de clase en el nivel de la escuela secundaria son un desafío cuando se mantiene un horario específico. Es un área en la que continuamos trabajando en este nuevo entorno para encontrar formas prácticas de limitar aún más la congregación de los estudiantes. Los estudiantes están en este entorno de pasillo solo por un breve período mientras pasan a su próxima clase … No hay duda de que la foto no se ve bien … Usar una máscara es una elección personal y no existe una forma práctica de hacer cumplir el mandato de usarla «.
Watters dijo que el tiempo para pasar de una clase a otra solo dura unos cinco minutos, pero los estudiantes de todas las clases a menudo caminan a gran velocidad de un extremo al otro del campus, pasando junto a innumerables personas.
Watters dijo que fue suspendida por la foto y que la escuela dijo que violó tres políticas de conducta: usar su teléfono durante el tiempo de instrucción, usar su teléfono durante el horario escolar para las redes sociales y filmar a los estudiantes y publicar en una plataforma de redes sociales.
Pero los estudiantes en los grados 9 a 12 están exentos de la prohibición del teléfono, dijo Watters, y no publicó la foto hasta que terminaron las clases. Watters admitió que rompió la política de publicar imágenes de estudiantes en las redes sociales, pero no se arrepiente.
«Me gustaría decir que este es un problema bueno y necesario», dijo Watters. «Mi mayor preocupación no es solo que yo esté a salvo, sino que todos estén a salvo porque detrás de cada maestro, estudiante y miembro del personal hay una familia, hay amigos y solo quiero mantener a todos a salvo».
Alta Spells de CNN contribuyó a este informe.
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