DLas esperanzas del viejo rey de regresar pronto a casa aumentan. La semana pasada, Juan Carlos I regresó para una regata en el noroeste de España. Se espera que el monarca emérito español esté en Madrid a finales de octubre cuando su nieta Leonor preste juramento a la Constitución española con motivo de su 18º cumpleaños. El sábado, sólo sus padres Felipe y Letizia acompañaron al joven recluta de infantería en su juramento de fidelidad en Zaragoza.
Desde el viernes, ya ningún motivo legal impide a Juan Carlos regresar de su exilio voluntario en Abu Dabi, donde vive desde agosto de 2020. En España, todas las investigaciones contra Juan Carlos ya estaban cerradas y, con la ayuda de amigos, había También saldó una deuda tributaria de más de cinco millones de euros.
Demanda desestimada en Londres
El juicio final contra el monarca, que ocupó el trono español durante 39 años, finalizó en Londres. Su ex amante Corinna zu Sayn-Wittgenstein-Sayn le exigió una indemnización de unos 145 millones de euros. Ella lo acusa de garantizar que ella y su familia fueran vigilados y amenazados. Juan Carlos le dio en una ocasión a la empresaria alemana 65 millones de euros, que él mismo había recibido de la familia real saudí.
Pero la jueza Rowena Collins Rice dictaminó que el Tribunal Superior no tenía competencia para conocer de la demanda civil contra un «acusado que vive en el extranjero». La demandante tampoco demostró adecuadamente que el acoso que describió “tuvo lugar en Inglaterra”.
El bufete de abogados de Juan Carlos se mostró satisfecho de que «como era de esperarse, se ha confirmado su inocencia». Esto también «restablece las condiciones para futuras apariciones públicas». Corinna zu Sayn-Wittgenstein-Sayn dijo que estaba profundamente decepcionada. “La intimidación y el acoso contra mí y mis hijos continúan. Juan Carlos utilizó todo su arsenal para desgastarme y el alcance de su poder es inmenso. “Estoy estudiando todas las opciones”, continúa, sin explicar los próximos pasos.
Juan Carlos, que estuvo en un salón náutico en Mónaco la semana pasada, no estará presente en el Parlamento español el 31 de octubre cuando la Princesa Heredera preste juramento. Pero ese mismo día asistirá a una recepción privada de la familia real en el Palacio del Pardo. Últimamente regresa cada vez con más frecuencia a Europa, para funerales, entregas de premios y regatas. Felipe VI pero mantiene las distancias. Hace una semana, ambos se encontraban a sólo unos kilómetros de distancia en Galicia. El hijo evitaba a su padre, de 85 años.
«Geek de la televisión amigable con los hipster. Pionero de las redes sociales de toda la vida. Fanático de los viajes profesionales».