Se espera que el presidente de Ruanda, Paul Kagame, gane un cuarto mandato en las elecciones del lunes contra dos candidatos de la oposición a quienes se les ha permitido competir contra él pero que sólo tienen expectativas modestas.
Kagame, de 66 años, ayudó a liderar el movimiento rebelde que puso fin al genocidio de Ruanda en 1994 y ha sido presidente desde 2000. Sólo tiene dos rivales como líder porque otros seis candidatos potenciales no fueron autorizados a presentarse ante la comisión electoral nacional.
Kagame ganó casi el 99% de los votos en las últimas elecciones de 2017, tras un cambio constitucional que eliminaba los límites de mandato que le habrían impedido volver a presentarse.
Su reelección podría ser una señal de mayor estabilidad, pero también de un escrutinio internacional continuo, dadas las acusaciones de violaciones de derechos humanos y las tensiones actuales con la vecina República Democrática del Congo.
Kagame fue elogiado por reconstruir un país de 14 millones de habitantes después del genocidio, en el que murieron más de un millón de personas. Ruanda se ha convertido en un centro financiero regional.
Pero su gobierno ha sido acusado por países occidentales y activistas de derechos humanos de amordazar a los medios de comunicación, asesinar a opositores y apoyar a grupos rebeldes en el vecino Congo.
El acuerdo migratorio de Ruanda de 2022 para acoger a miles de solicitantes de asilo procedentes de Gran Bretaña ha atraído una mayor atención por parte de la comunidad internacional. El recién elegido primer ministro británico, Keir Starmer, confirmó el sábado que cancelaría el acuerdo.
El gobierno de Ruanda ha negado todas las acusaciones en su contra y durante su campaña, Kagame prometió desarrollo y estabilidad continuos.
«Con ustedes, no hay nada que nuestro país no pueda lograr, porque hoy tienen líderes que no son estúpidos y ustedes no son estúpidos», dijo a sus jóvenes seguidores durante un mitin la semana pasada en la Provincia Oriental.
Ocho candidatos se habían presentado para enfrentarse a Kagame, pero sólo dos quedaron en la lista final validada por la comisión electoral. Los demás, incluidos los críticos más acérrimos de Kagame, fueron invalidados por diversas razones, incluidas condenas penales previas.
Los dos candidatos respaldados, Frank Habineza y Philippe Mpayimana, se presentaron contra Kagame en 2017.
En una entrevista con Reuters, Habineza, líder del Partido Verde Demócrata, dijo que esperaba superar su total de votos de 2017 del 0,48%.
«La gente sólo piensa en 2017 y dice que obtuve el 0,4%, pero olvidan que nuestro partido se presentó a las elecciones generales y obtuvo más del 5%», dijo.
Mpayimana, que trabaja para el Ministerio de Unidad Nacional y Participación Cívica, instó a los votantes en un evento de campaña a considerar su candidatura.
“Es cierto que no podemos cambiar el equipo que gana, pero también tenemos que darles a los equipos juveniles la oportunidad de ver si pueden cumplir sus promesas. Eso es democracia”, afirmó.
Más de 9 millones de electores están inscritos para las elecciones en las que también se elegirán miembros de la cámara baja del Parlamento, de 80 escaños. Se esperan resultados provisionales para el 20 de julio.
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