Los datos recopilados de la Estación Espacial Internacional sugieren que las poblaciones microbianas se adaptan rápidamente al entorno de la nave espacial; sin embargo, no se comprende el mecanismo de esta adaptación. Los bacteriófagos son mediadores prolíficos de la adaptación bacteriana en la Tierra.
Aquí estudiamos 245 genomas secuenciados de cepas bacterianas aisladas en la Estación Espacial Internacional en busca de bacteriófagos latentes (lisogénicos). Nuestro análisis indica que los genes asociados a fagos son significativamente diferentes entre las cepas de vuelos espaciales y sus homólogos terrestres.
Además, identificamos 283 profagos de longitud completa, aquellos que podrían iniciar la lisis bacteriana e infectar huéspedes adicionales, de los cuales el 21% son nuevos.
Estas regiones de profago codifican funciones que se correlacionan con una mayor persistencia en entornos extremos, como los vuelos espaciales, incluida la resistencia y virulencia a los antimicrobianos, la reparación de daños en el ADN y la latencia.
Nuestros resultados correlacionan la adaptación microbiana durante los vuelos espaciales con funciones codificadas por bacteriófagos que pueden afectar la salud humana durante los vuelos espaciales.
Área sombreada en violeta: nodo 3; ubicaciones de muestreo: Domo (L1), Compartimiento de higiene y desechos (L2), Equipo de ejercicio resistivo avanzado (ARED) (L3), Región sombreada en verde: Nodo 1; ubicaciones de muestreo: mesa de comedor (L4), techo 4 (L5), región sombreada en amarillo: módulo multiusos permanente; ubicaciones de muestreo: (L6), región sombreada en azul: ubicaciones de muestreo en laboratorios de EE. UU.: Lab Overhead 3 (L7), región sombreada en naranja: nodo 2; Lugares de muestreo: alojamiento de la tripulación (L8). Imágenes cortesía de la NASA.
La adaptación microbiana a los vuelos espaciales se correlaciona con funciones codificadas por bacteriófagosComunicaciones de la naturaleza (acceso abierto)
astrobiología